25 de julio de 2025
Treinta años en el sector de la moda. Veinte en la misma empresa. Hasta que una mala gestión del alquiler hace que todo se esfume. La empresa se traslada a otra provincia, lejos, muy lejos de su casa, de su gente, de su vida. Le ofrecen irse con ellos, pero a cambio del desarraigo total. Y ella dice que no.
Cinco años en paro. Primero para cuidar de sus hijos, que todavía son pequeños. Y luego, porque el sistema no está hecho para mujeres como ella. Porque en las entrevistas la miran como si ya no encajara: que si la edad, que si ya no estás al día, que si “las de tu generación”… En uno de los trabajos incluso le negaron la formación por lo mismo: prejuicios disfrazados de excusas.
Pero llega un día en que algo cambia. Un día en que decide que ya basta. Que si no hay sitio para ella, se lo va a crear…………..Y se lo crea.
Junto a su familia, monta un nuevo proyecto de vida: cuatro habitaciones turísticas en la planta baja de su casa, con entradas independientes. Un proyecto hecho con mimo, con coraje, y sobre todo con la necesidad de conciliar. Su hija tiene diez años, y ella quiere estar. No para cumplir, sino para vivir.
Ahora es su propia jefa. Y se ríe pensando que nunca más tendrá que aguantar que le digan “vete a tomar viento fresco”… porque ahora, si se va a pasear, lo decide ella. Porque ha empezado un nuevo capítulo. Porque ha apostado por un sueño.
Porque nadie regala nada, pero quien se atreve, gana.
Os espera en Iparra-Txiki-Berri, en Irun. Y a nosotras, nos inspira para seguir contando estas historias. De mujeres que borraron su currículum… pero no su talento.
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